Estas son las principales características del alerce:
- Durabilidad natural: el duramen es bastante resistente a insectos y hongos, aunque la albura es menos durable.
- Alta densidad: madera semidura, estable y poco propensa a deformaciones — ideal tanto para exteriores (revestimientos, estructuras) como para interiores.
- Resistencia biológica: protege bien contra la humedad, los insectos y el moho, sin necesidad de tratamiento químico.
- Estética distintiva: tono miel o marrón rojizo en estado natural, que evoluciona hacia un elegante gris con el paso del tiempo.
El alerce es ideal para múltiples aplicaciones — desde carpintería y diseño de interiores hasta fachadas y terrazas exteriores — gracias a su robustez natural y su estética duradera. Su precio varía según la calidad de la madera, el espesor y las dimensiones elegidas.